Wednesday, December 27, 2006



Now listen here, you mullet.
Why don't you just light your tampon,
blow your box apart?
Because it's the only bang you're ever gonna get!

Thursday, December 21, 2006

Tuesday, December 19, 2006

UN CARRITO SANDWICHERO


"No te preocupes, si no tienes trabajo te consigo tu carrito sandwichero"

LIBRO DE TEMPORADA

Sunday, December 10, 2006

RUN



When we meet Manni (Moritz Bleibtreu), a small time courier for big time gangster, he is working a standard pick-up/drop-off, and everything is going just fine. When the job is done, all he has to do is wait for his girlfriend, the orange-haired punk girl Lola (Franka Potente), to pick him up. But today is unlike any other day. Due to an incident while she was buying a pack of cigarettes, Lola is late, and Lola is never late. One stroke of bad luck leads to another, and by the time Manni calls Lola, he is at a pay phone with a big, big, big problem. His unforgiving boss will meet him in twenty minutes to pick up 100,000 marks; money that Manni, suddenly, does not have.Lola rushes out of her apartment and down the street, attempting to get to Manni and, somehow, pick up 100,000 marks on the way. She tears through the city, in a whirl of bums, nuns, babies and guns. Down sidewalks, into offices, through traffic and back again. As her feet slap the pavement and the seconds tick down, the tiniest choices become life altering (or ending) decisions, and the fine line between fate and fortune begins to blur.

go global ----->


Sunday, December 03, 2006

spinoff 2007


A spin-off (or spinoff) is a new organization or entity formed by a split from a larger one, such as a television series based on a pre-existing one, or as a new company formed from a university research group. In literature, especially in milieu based popular fictional book series like mysteries, westerns, fantasy, or science fiction the term sub-series is generally used instead of spin-off, but with essentially the same meaning.

tic tac tic tac

Que Sera, Sera,Whatever will be, will beThe future's not ours, to see Que Sera, SeraWhat will be, will be.When I was young, I fell in loveI asked my sweetheart what lies aheadWill we have rainbows, day after dayHere's what my sweetheart said.Que Sera, Sera,Whatever will be, will beThe future's not ours, to seeQue Sera, SeraWhat will be, will be.

Saturday, December 02, 2006

Friday, December 01, 2006

Sunday, July 23, 2006

Si mi propaganda te ofende no entiendes de arte...




















Si tu propaganda me ofende es guerra sucia...

Democracia secuestrable

Enrique Krauze
Para ilustrar el argumento ad terrorem con el que las ideologías totalitarias imponían su verdad a la sociedad, el filósofo polaco Leszek Kolakowski contaba una fábula: dos niñas emprenden una carrera en un parque; la que va atrás exclama continuamente, a grandes voces, "¡voy ganando!, ¡voy ganando!", hasta que la que lleva la delantera abandona la carrera y se echa a llorar en brazos de su madre, diciendo: "no puedo con ella, siempre me gana".Sin el desenlace, algo similar está ocurriendo en México. Tras una jornada electoral libre, ordenada y pacífica en la que sufragaron 42,249,541 mexicanos cuyos votos fueron computados en 130,477 casillas por 909,575 ciudadanos (no funcionarios), el candidato del PRD a la presidencia, Andrés Manuel López Obrador, resultó perdedor por un margen de 0.57%, equivalente a 240,822 votos, frente al candidato del PAN, Felipe Calderón. Los números del sistema electrónico de conteo preliminar, avalado por la Universidad Nacional Autónoma de México, coincidieron con el recuento final efectuado en los 300 distritos electorales que concentraron las actas de las casillas. Fuera del resultado adverso en la elección presidencial, en la misma jornada electoral el PRD logró convertirse en la segunda fuerza en el Poder Legislativo (aumentando considerablemente su posición en ambas Cámaras) mientras que su candidato a la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, triunfó con el 47%. Por si fuese poco, el PRD arrasó con casi todos los puestos ejecutivos (las delegaciones en las cuales está dividido el Distrito Federal) y en la Asamblea Legislativa del propio Distrito Federal.Esa es la realidad que atestiguaron 1,800 consejeros distritales, 970,000 representantes de todos los partidos, 24,769 observadores nacionales y 639 internacionales. No obstante, y a pesar de que Andrés Manuel López Obrador considera válidas las elecciones que produjeron triunfos nunca vistos para su partido, no acepta su derrota personal. Dado el estrecho margen de la elección presidencial, ha decidido ejercer su derecho a impugnar los resultados en el Tribunal Electoral de la Federación. Esta instancia final e inapelable será la que decida, en un plazo cuya fecha límite es el 6 de septiembre próximo, cuáles irregularidades reclamadas son válidas, en cuáles casillas procede o no un recuento de los votos, y cuál es el resultado final de la elección presidencial.Si el candidato del PRD se hubiese limitado a instrumentar esa estrategia jurídica, su actitud no habría dañado inadmisiblemente el proceso electoral ni socavado a la frágil democracia mexicana. Pero, como era previsible, López Obrador no podía conformarse con una estrategia legal, que él mismo, despectivamente, ha llamado "formal". Tal y como ha hecho a lo largo de su vida, él tenía que ir por más, ir por todo, y es allí donde encaja la fábula de Kolakowski: tenía que recurrir al argumento ad terrorem para lograr su propósito.Como la niña del cuento, sabedor desde el 2 de julio por la noche de que las tendencias no le favorecían, acudió al Zócalo para declarar: "Hemos ganado la presidencia de la república". Días más tarde, luego del recuento oficial que en el mismo sentido hizo el Instituto Federal Electoral (organismo ciudadano autónomo que, revirtiendo una larga historia de fraudes, desde 1996 organiza con éxito y probidad las elecciones en todos los niveles federales), López Obrador congregó al "pueblo" a una "asamblea", en la que llamó a Fox "traidor a la democracia", y utilizó la palabra más ominosa del diccionario político mexicano: la palabra "fraude". Esta descalificación de la institución electoral (que acababa de dar el triunfo a cientos de sus candidatos) y los discursos incendiarios que han seguido desde entonces, hasta culminar en un llamado "a la resistencia civil", representan una táctica nada "formal"; representan precisamente el recurso ad terrorem aplicado con un riesgo enorme para la paz de México.Además de proclamarse vencedor, insultar al presidente Fox, amenazar a Felipe Calderón y a su familia, llamar delincuentes a los funcionarios del IFE, considerarse traicionado por miembros de su propio partido y adelantarse al veredicto del Tribunal Electoral, López Obrador ha echado mano de un repertorio digno de una novela de Orwell. Irregularidades aisladas, presuntas y, en todo caso, no dictaminadas por el Tribunal, son presentadas al público como evidencia palmaria de que todo el proceso estuvo viciado, ignorando el testimonio de los observadores extranjeros y de millones de mexicanos. Cuando sus propios representantes de casilla negaron la supuesta irregularidad que López Obrador pretendió demostrar en un video, el líder aseguró que fueron "comprados". A la mentira aúna la contradicción (del fraude "cibernético" a su negación: el fraude "a la antigüita"), la inconsistencia (aunque pide "abrir todas las casillas y contar voto por voto", ante el Tribunal Electoral sólo presentó impugnaciones en el 39% de las casillas) y la calumnia (de existir un millón y medio de boletas "robadas", el hecho implicaría que miles de representantes del PRD son delincuentes electorales). El daño causado a nuestras instituciones electorales puede ser irreversible. Ante la andanada ad terrorem, ¿qué ciudadano querrá en el futuro participar en una casilla?Pero lo más preocupante, desde luego, es que López Obrador ha convocado a movilizaciones de centenares de miles de personas en toda la república "en defensa de la "democracia", la misma democracia cuyas instituciones ha puesto en entredicho. Si bien ha insistido en que las marchas serán "pacíficas" y "no caerán en provocaciones", sabe muy bien que en el actual ambiente de extrema polarización, la provocación puede provenir de cualquier lado. Para calibrar sus intenciones no hace falta ser adivino, él mismo lo ha expresado con todas sus letras, y es preciso creerle: él nunca aceptará un resultado adverso, ni de los votantes, ni del Tribunal Electoral; él "ganó la presidencia" e irá "tan lejos como la gente quiera"."La gente", "el pueblo", no son, por principio, los 27,034,972 mexicanos de todas las clases que no votaron por él; no son siquiera los 14,756,350 ciudadanos que lo apoyaron en las urnas. "La gente", "el pueblo", son aquellos que puede movilizar en las calles y plazas del país, y que lo ven como él se ve a sí mismo, como el Mesías de México. ¿Y quién interpreta los deseos de ese "pueblo", depositario de la ley natural y divina, no de la despreciable ley escrita por los hombres? El líder carismático que encarna la Verdad, la Razón, la Historia y el Bien, el líder que prometió salvar a México de la opresión, la desigualdad, la injusticia y la miseria, el que "purificará la vida nacional": Andrés Manuel López Obrador.El mundo ha visto muchas veces esa película. Es el huevo de la serpiente dictatorial. Un hombre impermeable a la verdad objetiva, un Mesías que se ha proclamado "indestructible", pretende secuestrar la democracia mexicana y, de no obtener el rescate exigido, incendiar al país. No exagero. De hecho, el vocero del PRD, Gerardo Fernández Noroña, declaró hace unos días a Los Angeles Times que, en última instancia, está abierta la vía de la "insurrección". Pero en una democracia (y México es ahora una democracia, aunque su larga historia se empeñe en desmentirlo) no son las teas ardientes, los comités de salud pública, ni los líderes iluminados los que deciden: es el voto ciudadano, es el imperio de la ley.

Tolerancia

Luis Rubio
Las elecciones son el medio para que un candidato acceda al poder, no son un fin en sí mismo. El poder, el gobierno, es el medio a través del cual se conduce el proceso de desarrollo de una sociedad. Para que sea posible llevar a cabo esa función de conducción y desarrollo es imperativo que toda la sociedad sea parte del mismo y ahí yace la razón elemental por la cual es imperativa la tolerancia hacia las diferencias, no sólo las que arrojó el proceso postelectoral, sino sobre todo las que se evidenciaron a lo largo de las campañas por la presidencia. Lo que hoy estamos viviendo es un proceso de desgaste que se retroalimenta y no contribuye a crear condiciones para lograr el desarrollo. Por ello es tan importante cambiar los términos de la disputa actual.La disputa actual está caracterizada por círculos viciosos. Desde la campaña, dominó la noción de que se trataba de una contienda entre la izquierda y la derecha, cuando en realidad éstas son meras etiquetas para ponerle nombres distintos a un mismo proceso. Este es un primer círculo vicioso del que no hemos salido: ni es cierto que se trataba de dos posturas antagónicas en el eje derecha-izquierda, ni existe un Estado capaz de imponer un camino único para el devenir social como hace tres o cuatro décadas.Otro círculo vicioso ha surgido del empecinamiento falaz del recuento general o la ilegalidad del recuento. Una falacia lleva a la otra: ciertamente, un fraude generalizado como el que plantea el candidato del PRD es imposible (además de que, si fuera cierto, el PRD no tendría hoy 60% más escaños en la Cámara de Diputados y el Senado), pero igualmente cierto es que el Trife tiene amplias facultades para decidir en materia electoral. No hay racionalidad para el empecinamiento sobre temas que no son lógicos y sobre los cuales el Tribunal puede y debe decidir. Ambas partes en esta disputa han caído en círculos viciosos que los (nos) tienen empantanados.La noción de un recuento general choca con toda la lógica de un proceso tan estructurado y consolidado como el que hoy existe en el país. La mera idea de que alguien pudiera urdir un fraude generalizado en el que participaron no sólo los funcionarios del IFE, sino toda la estructura ciudadana que sustenta el proceso e incluso los representantes de los partidos en cada casilla, constituye una afronta no sólo a la legalidad, sino a la respetabilidad de todos los que participaron en el proceso: desde los votantes hasta los ciudadanos responsables de los centros de votación.Nadie razonable en el México de hoy puede creer en un fraude generalizado. Pero igual de chocante es pensar que los resultados arrojados el día de la elección por un sistema diseñado para compensar las desconfianzas del pasado no puedan ser revisados. El fraude no es un argumento razonable, pero se apuntala y adquiere credibilidad por el dogmatismo del lado contrario. Mejor disminuir las tensiones y dejar que sea el Tribunal, en un entorno menos rijoso y más propicio para una decisión saludablemente judicial y no política, quien tenga la última palabra.Todos los partidos políticos, igual los que ganaron y los que perdieron, enfrentan profundas contradicciones internas. El PRD es quizá el caso más patético: fue, con mucho, el partido que más ganó y, sin embargo, el que más dificultades encuentra para procesar su victoria. Ningún partido experimentó los avances legislativos que logró el PRD, pero su militancia está poniendo en entredicho la posibilidad de consolidar esa victoria para ganar en la próxima contienda presidencial. Pero también es comprensible la lógica interna del PRD, pues el partido está operando, porque así se ha conformado el entorno político y porque así conviene a su candidato (y ambos asuntos se retroalimentan), en un contexto de aislamiento: mientras sus integrantes se sientan más aislados, mayor su sensación de encontrarse amenazados y, por lo tanto, menos dispuestos a resolver las contradicciones internas. En tanto persista esa sensación de amenaza externa, será posible que se mantenga el absurdo de la demanda dual, lógicamente incompatible, del recuento y la anulación, conceptos obviamente excluyentes pero que, por alguna extraña razón, los perredistas aceptan como compatibles.Al PRI, por su parte, le encantaría enfrentar los dilemas que tiene frente a sí un partido en ascenso como el PRD. El gran perdedor de la contienda, el PRI, tiene que comenzar la reforma interna que no emprendió luego de su derrota en el 2000. A diferencia del PRD y del PAN, las contradicciones que enfrentan los priistas son mucho más obvias y tajantes: la pregunta para ellos es si serán capaces de remontar sus diferencias internas en aras de recuperar el poder o si se dejarán consumir por sus rivalidades históricas (de hecho, de origen) ya sin el poder, hasta acabar en la más absoluta irrelevancia. Lo irónico de la situación es que el PRI posee la mejor y más efectiva estructura territorial y eso tiene un enorme valor económico y político; pero también es cierto que un partido con una diversidad tan grande de intereses y grupos (producto de su historia y la del país) sería el que más se beneficiaría de una reorganización general del sistema de partidos.Las contradicciones más absurdas son sin duda las del PAN. El partido presuntamente ganador en la contienda presidencial enfrenta las contradicciones propias de un partido demócrata cristiano que nunca abandonó los rasgos de la derecha anterior a la segunda guerra mundial, periodo en el que se formó. A diferencia de sus contrapartes europeos, que no tuvieron más remedio que transformarse, el PAN sigue siendo una extraña mezcla de modernidad y anquilosamiento reaccionario. La pregunta es cuál de las dos corrientes dominará en los forcejeos internos.Todas estas contradicciones son producto del pasado. La política mexicana no ha sido capaz de cerrar el ciclo político del autoritarismo y dejar atrás sus características y modos de funcionar. Lo que estamos viviendo es la consecuencia de una transición política confusa, no conducida ni concluida. Nuestro proceso político se parece más al juego de Juan Pirulero donde cada quien atiende a su juego antes que a una democracia en ciernes que aspira al desarrollo, definido éste en todas sus dimensiones.Nada de ese desarrollo será posible mientras los perredistas sean incapaces de moderar sus procesos internos, los priistas de renovarse y los panistas de modernizarse. Un poco de tolerancia podría comenzar a encauzar estos procesos necesarios, pero el tiempo para esto no es ilimitado.

Saturday, July 22, 2006

Siete falsedades y...

Jaime Sánchez Susarrey
1. Hubo un gran fraude electoral. Falso. AMLO y el PRD no han presentado ninguna evidencia consistente. Los ejemplos de irregularidades son aislados. Unas cuantas urnas en un mar de 130 mil casillas. Peor aún. Las quejas contra los resultados de la elección presidencial no se han extendido a las elecciones de diputados y senadores. Sin embargo, fueron los mismos ciudadanos los que contabilizaron los votos en los tres casos. ¿Cómo explicar, entonces, que haya habido irregularidades mayúsculas en una urna y no en las otras? ¿Por qué unas actas están alteradas y las otras son inmaculadas? Es simplemente imposible. No hay lógica ni coherencia. La denuncia de que hubo un gran fraude no es más que eso... un gran fraude.2. AMLO es un político pragmático con el que se puede negociar; no hay que cerrarle las puertas. Falso. No hay ningún elemento en su biografía política que avale esta afirmación. Antes al contrario, toda su trayectoria está plagada de protestas y movilizaciones. Jamás ha creído en las instituciones. Desconfía de ellas por principio. Pero no sólo eso. Su estructura psicológica no le permite reconocer la realidad. De haber alcanzado la Presidencia, los pronósticos más negros y ominosos se habrían cumplido. Su reacción frente al fracaso confirma lo que algunos advertimos. Es un líder mesiánico que prefiere inmolarse a aceptar la derrota. Su apuesta es el todo por el todo. No hay mediaciones ni matices. Ahora ya nadie lo puede dudar: AMLO es un gran peligro para México.3. El conteo voto por voto y casilla por casilla despejará las dudas y abrirá la puerta para que Andrés Manuel reconozca su derrota; de otro modo, las sonrisas se convertirán en puños y habrá conflictos e inestabilidad. Falso. López Obrador se comprometió públicamente en tres ocasiones (con Adela Micha, Víctor Trujillo y López Dóriga) a aceptar su derrota aun cuando fuese por un solo voto de diferencia. No cumplió. Hoy exige el recuento de nuevo, pero no se compromete a aceptar el resultado. Por el contrario, denuncia que la elección está viciada de origen y que bajo ninguna circunstancia reconocerá a Felipe Calderón como un Presidente legítimo. A confesión de parte, dicen los abogados, relevo de pruebas.4. AMLO y el PRD no pretenden anular la elección; lo que quieren es limpiar el proceso y confirmar que es él quien efectivamente obtuvo la mayoría. Falso. López Obrador, dentro de su demencia, sabe que es imposible que la ventaja de 244 mil votos a favor de Calderón se revierta. Sus colaboradores más cercanos también lo entienden. Su estrategia de abrir todos los paquetes electorales y contar voto por voto busca crear confusión. Porque una vez que aparezca un nuevo resultado, utilizarán ese dato como un argumento más de que hubo un gran fraude y que la elección es un cochinero. Su objetivo fundamental está en otra parte: anular la elección para que AMLO pueda competir de nuevo dentro de 14 o 18 meses. De hecho, un fallo del Trife anulando los comicios es el único escenario que le resulta admisible al candidato de la alianza por el Bien de Todos.5. La resistencia es pacífica; la violencia y la presión por medio de las movilizaciones y las protestas es inexistente. Falso. AMLO amenazó públicamente, ante 1 millón de personas en el Zócalo, a la familia de Felipe Calderón. A los tres días, el candidato victorioso fue objeto de una agresión por un grupo de mujeres y de jóvenes. López Obrador no sólo no la condenó, sino que la justificó: los ciudadanos están irritados por el fraude, le dijo a Loret de Mola. Ahora sabemos, además, que el más violento de los agresores se llama Diego Valle y trabaja en la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal. Todo indica, pues, que el ataque fue orquestado. El mensaje ya fue enviado y es muy claro: mis amenazas, Felipe, no son vanas, cuídate y cuida a tu familia. Y ustedes, el resto de los ciudadanos, incluidos empresarios, periodistas e intelectuales, tomen nota: porque si esto hago a plena luz del día con el candidato vencedor, imagínense lo que puede sucederles a ustedes.6. La anulación de la elección y la designación de un Presidente interino que convocara a nuevos comicios dentro de 15 meses sería un mal menor; porque de otro modo, habrá inestabilidad, conflictos y Felipe Calderón no podrá gobernar. Falso. La anulación de la elección y la designación de un Presidente interino es el peor de los escenarios. Crearía inestabilidad política y financiera. La fuga de capitales y la devaluación estarían a la orden del día. El país se hundiría en una nueva y larga campaña por la Presidencia de la República en un clima de confrontación y polarización sin precedente. Las presiones sobre los medios de comunicación y sobre el Presidente interino serían enormes. Lo que hoy estamos viendo es apenas la punta del iceberg. AMLO encabezaría personalmente los movimientos para sitiar al Estado. A final de cuentas, él no cree en la imparcialidad de ninguna institución. Los opositores y críticos serían perseguidos y amenazados. Sería, en suma, ponerle la alfombra a una insurrección disfrazada de campaña electoral.7. Los nuevos comicios son la única forma en que puede haber una reconciliación nacional. De ellos resultará un ganador indiscutible que será reconocido por sus oponentes y podrá gobernar con plena legitimidad. Falso. No hay, de nuevo, ningún elemento que abone esta tesis. Y no lo hay por una razón muy simple: si AMLO pierde otra vez, desconocerá los resultados y clamará fraude. No importará entonces, como no importa ahora, lo absurdos o estúpidos que resulten sus pruebas y sus argumentos. La única elección que López Obrador reconocerá como válida y legítima será aquella que lo convierta en presidente de la República; todas las demás, no importa cuántas veces ocurran ni cómo se realicen, serán siempre espurias y confirmarán que hay un complot en su contra.Corolario. Lo que hoy está en juego es el futuro de la República y de las instituciones democráticas que se han venido edificando a lo largo de décadas. Para preservarlas hay que ajustarse a la ley. Los conflictos no se van a solucionar cediendo a los chantajes ni a las presiones. Ya basta. Porque si se trata de evitar la confrontación a cualquier costo, más vale declarar a Andrés Manuel López Obrador Presidente electo desde ahora y proponerle al nuevo Congreso que el 1o. de septiembre lo eleve a Presidente vitalicio. Sólo de ese modo su Alteza Serenísima tendrá satisfacción plena y regresará a la República la calma, la paz, la esperanza y, sobre todo, la alegría, sí señor, la verdadera alegría.

Friday, July 21, 2006

Resistencia ¿creativa? por el bien de todos














Jesusa Rodríguez y su grupo de resistencia creativa frente al corporativo de Sabritas


Bueno pues Chucha y su -super creativo y chido grupo de resistencia- lograron que el cartón de Calderón publicado en este blog y tomado de Reforma hace unos días, adquiera vigencia, se vuelva real http://photos1.blogger.com/blogger/584/809/1600/calderon.jpg Las papas Sabritas, el osito Bimbo y la planta de Jumex están todos coludidos en el compló.
Lo que debemos seguir celebrando son las ocurrencias de la banda intelectualcomicomagicomusical que con las expresiones más altas de producción artística denuncian el fraude y defienden la democracia, eso si por el bien de todos. Algunas de las inteligentes y agudas leyendas de la Chucha y su super colectivo creativo y chido grupo de resistencia:
"Me re-niego a comer Sabritas"
"Sabritas financió el fraude a la nación"
"Sabritas delincuente electoral promotores del odio"
"Calderón no te quieras comer más de una"
"Sabritas y el fraude son lo mismo"

Wednesday, July 19, 2006

Save a Horse Ride a Cowboy

Monday, July 17, 2006

zidane fidel castro

El traje del Caudillo

Jesús Silva-Herzog Márquez
En una comarca mexicana apareció un Gran Caudillo tan aficionado a las intrigas que nada veía que no formara parte de una vastísima conspiración. Al momento que sus párpados se abrían, desfilaban ante sus ojos intrigantes tramando la siguiente puñalada. El paisaje de su mirada era un cuento sencillo y comprensible. No era necesario mucho esfuerzo para entender su fábula. El Bien había encarnado en él, el gran hombre de la esperanza. Era un hombre que no dejaba de divulgar su evangelio. El Mal, por el contrario, se escondía entre los árboles, bajo la tierra, en las nubes. El mal podía estar en todos lados. Hasta la sopa que bebía el gran hombre podía estar envenenada. Nadie más que el Caudillo podía detectar la sombra maligna. Por ello los habitantes de ese reino entregaron su inteligencia al Gran Caudillo. Podían dudar de sus ojos y de sí mismos pero nunca del Virtuoso. Ellos podrían equivocarse. Él no.La Verdad y la Justicia eran los reinos exclusivos del Gran Caudillo. De su convicción manaba la Realidad. Nada sucedía realmente sin su Testimonio. La lluvia empezaba a mojar en el momento en que el Gran Caudillo sacaba su paraguas. Mientras eso no ocurría, el agua que caía era un engaño orquestado por los malignos. Por eso los súbditos del Caudillo decidieron deshacerse de todos los instrumentos de la vieja objetividad. Una tarde todos los habitantes de aquel reino quemaron los relojes en la plaza central. Habían llegado a la conclusión de que los instrumentos de las manecillas estaban infectados. Que todas las horas contengan la misma cantidad de segundos era una treta. Nos engaña quien pretende contar de igual modo las horas felices y las horas tristes. Es un fraude darle el mismo valor al tiempo de la esperanza que al tiempo del miedo. El día, las semanas, las estaciones se midieron desde ese momento con un instrumento que divulgaba el compás emocional del Buen Hombre. Si el amado líder estaba contento, las horas de todo el reino acompañarían su dicha. Si se entristecía, el reloj colectivo se adheriría a su aflicción. Lo mismo sucedió con el resto de los dispositivos de la medición. Condenados como mecanismos sospechosos, el reino se deshizo de las reglas, los termómetros, los censos y las siniestras estadísticas. La suposición del Gran Caudillo era infinitamente más confiable que cualquier dato. Por eso se puso a la venta la biblioteca del reino y se colocó en su lugar el archivo de las opiniones del Caudillo. Los súbditos del reino adoraban esa colección de ocurrencias diarias como el santuario de la moral pública.Lo mismo podría decirse de las reglas. Las viejas normas del reino resultaron obsoletas: el abrigo de los privilegiados. Lo debido era lo hecho por el Caudillo. Lo indebido, aquello que condenaba el Gran Hombre. En el palacio de gobierno se inscribió esta frase sentenciosa: "El respeto a los principios del Gran Hombre es la paz". En otras palabras, quien no se atiene a los deseos del Caudillo llama a guerra civil. Por cierto, el nuevo estatuto del reino resultó rentable: los jueces y legisladores decidieron voluntariamente abstenerse de declarar la reglas del lugar. La ley sería simplemente la voz del Caudillo. El parlamento cerró sus puertas. Los jueces se fueron de vacaciones permanentes.De ese modo, quien quisiera conocer las ordenanzas del reino, tendría que codificar el pontificado personal del Caudillo. El investigador interesado en saber cuántos habitantes vivían en el reino acudía al dicho más reciente del Caudillo. Si alguien quería averiguar lo que había sucedido recientemente en algún paraje distante, habría de consultar la opinión del incorruptible. Los certificados, las pruebas, los testimonios eran totalmente irrelevantes para la constatación de la verdad. Es más, todos esos certificados resultaban engaños. Frente al fraude de lo visible, se imponía la convicción de un hombre. El Caudillo se convirtió en la única fuente de la verdad.Ahí empezó la decadencia del feliz reino. El Caudillo amante de las intrigas empezó a ver conspiraciones en su antesala. Primero fue un hombre que se atrevió a sacar su paraguas cuando sintió gotas de lluvia en su cabeza. Admiraba y quería al Caudillo, pero un día se distrajo, sintió que lo mojaba el agua y abrió la pantalla. ¡Herejía inadmisible! El Caudillo no había decretado la existencia oficial del aguacero, por lo que la sombrilla resultaba abiertamente insurreccional. El hombre del paraguas fue condenado como traidor. Se le acusó de venderse a los malignos y de pasar al territorio enemigo. Fue fusilado. El fusilamiento sirvió de advertencia. En temporada de tempestades todos salieron a demostrar que el sol radiaba. Ostentaban su lealtad con sus cuerpos empapados. Pero a las siguientes lloviznas los paseantes empezaron a sacar sus paraguas sin esperar el permiso oficial. El Caudillo empezó a quedarse solo, rodeado de fanáticos cada vez más vehementes. Los súbditos se atrevieron a abrir los ojos y empezaron a recuperar el uso de su inteligencia. El Caudillo no sobrevivió el momento en que la razón regresó a la cabeza de sus seguidores.En su fundación, el reino había mirado hacia la colina de la izquierda. Defendía la igualdad, la racionalidad, la legalidad. Los delirios conspiratorios del Caudillo llevaron a ese reino al extremo contrario: a la promoción fanática de un elegido, a la fascinación por un mito que no se interesa en la verdad y al imperio del chantaje. Hubo que esperar al primer súbdito para que el grito cundiera: el Caudillo está desnudo.

El cabezazo

Denise Dresser

"¿Por qué, por qué, por qué?", gritó un comentarista francés ante el cabezazo estremecedor de Zinedine Zidane, en los últimos minutos del juego que su equipo finalmente perdió. "¿Por qué, por qué, por qué?", deberían gritar quienes apoyan a Andrés Manuel López Obrador ante el cabezazo que le está dando a su causa. Zozobra, desconcierto, daño a la izquierda en cuya cancha tan bien jugó. Eso es lo que produce AMLO al exigir un recuento y al mismo tiempo, negarse a reconocer sus resultados. Ésa es la confusión que crea alguien que rechaza la anulación de la elección, pero hace todo para provocarla. Ése es el rechazo que produce un hombre que no quería ser clasificado como un peligro, y ahora se empeña en constatar que lo es.En momentos definitorios es crucial que los grandes jugadores no pierdan la cabeza y AMLO parece no controlar la suya. Inconsistencia tras inconsistencia, contradicción tras contradicción, López Obrador parece estar haciendo todo para arruinar su propia reputación. Allí va, en los últimos minutos del juego, dándole a sus adversarios todos los argumentos para que lo saquen del partido. Actuando de maneras que ameritan una tarjeta roja. Volteando a un cada vez mayor número de espectadores en su contra. Evidenciando que muchos jugadores tenían buenos motivos para desconfiar de él. Dándole la razón, cabezazo tras cabezazo, a todos sus enemigos. El dios del equipo convertido en un simple mortal.Como Zidane, AMLO dirá que no ha tenido más remedio que responder a las provocaciones. Y claro que las hubo. Una después de otra y no hay necesidad de contratar a un especialista, capaz de leer labios, para descifrar su intención. El desafuero y la campaña multimillonaria de Vicente Fox y la guerra sucia y la compra de publicidad por el Consejo Coordinador Empresarial y la conducta criticable de Luis Carlos Ugalde y la parcialidad de los medios y la cerrazón de filas alrededor de Felipe Calderón. Pero ése fue el terreno de juego en el que Andrés Manuel aceptó jugar desde hace años. Allí se convirtió en uno de los jugadores más valiosos del PRD y hoy ha contribuido a su expansión. Allí armó jugadas ganadoras, metió goles célebres, se convirtió en la estrella de la izquierda nacional. Llegó a la final y tenía todo para ganarla, quizás incluso en tiempos extras.Por eso resulta tan sorprendente su autosabotaje actual, su cabezazo frontal. Con él, ha transformado una impugnación legítima en una batalla política que no lo es. Con él, ha sustituido la lógica de sus acciones con la vehemencia de sus emociones. Porque no tiene sentido exigir el recuento voto por voto y -al mismo tiempo- negar sus resultados. Porque no tiene sentido demandar la transparencia y -al mismo tiempo- argumentar que nunca ha existido. Porque no tiene sentido denunciar la ilegalidad de la contienda y -al mismo tiempo- aceptar los avances del PRD en ella. Porque no tiene sentido pedir que se examinen los votos de esta elección y -al mismo tiempo- sugerir que es necesario anularla. Porque no tiene sentido decir que llevará esto "hasta donde quiera la gente" -y al mismo tiempo- no confiar en la confirmación de su voto.Paradójicamente, la mejor manera de lidiar con un jugador que cuestiona las reglas es usarlas para contenerlo. Por ello, México tendrá que recontar los votos para trascender la confusión que López Obrador ha logrado crear. El Trife tendrá que recontar los votos para evidenciar el objetivo del cabezazo que se empeña en dar. Ante la ambigüedad de AMLO va a ser necesaria la claridad del electorado. Ante la cabeza caliente de AMLO va a ser necesaria la frialdad de los datos duros. Ante las acusaciones de fraude va a ser necesaria la certeza de que en realidad no lo hubo. La transparencia total no como concesión, sino como muro de contención. La rendición absoluta de cuentas no para darle a López Obrador lo que quiere, sino para impedir que lo obtenga con otros métodos. La ruta institucional para el hombre que se empeña en cuestionarla cada medio tiempo. Los postes de la portería colocados con firmeza ante alguien quiere moverlos en cada torneo.El recuento para evidenciar la desmesura y elevar los costos de su seguir incurriendo en ella. Porque si AMLO pierde el recuento ya no podría seguir jugando. Ya no podría seguir cabeceando. Una gran parte del estadio se pondría de pie para exigir que fuera enviado a la banca y tendría que resignarse a lanzar consignas desde allí. Pero muchos miembros del establishment político y económico del país no lo entienden. Creen que para lidiar con López Obrador basta con odiarlo. Creen que al presentar la elección como un caso cerrado, debilitan la posición de AMLO cuando contribuyen a lo contrario. Su resistencia al recuento alimenta la percepción de que el fraude masivo ocurrió, aunque hoy no hay evidencia para comprobar que fuera así. Miles de mexicanos están marchando porque las élites del país insisten en darles motivos para hacerlo.Cada vez que Vicente Fox argumenta que quienes votaron por López Obrador son "renegados" ayuda a crearlos. Cada vez que las cúpulas empresariales exigen el silbatazo para darle fin al partido, evidencian todas las jugadas que -como el Juventus italiano- financiaron. Cada vez que Calderón habla de su gabinete y actúa como ganador incuestionable, enoja a quienes no creen que lo es. Cada vez que el panista asegura que "no es posible legalmente" volver a examinar los votos, sugiere que tiene algún motivo para esconderlos. Cada vez que el presidente del IFE asume posiciones que ponen en tela de juicio su neutralidad, le da argumentos a quienes creen que nunca la tuvo. Acción tras acción, los adversarios de AMLO vuelven mártir a un hombre que, a cabezazos, dobla las reglas del deporte que aceptó respetar.El jugador que rehusaba ser peligroso, pero que actualmente se comporta así. El que no sabe lo que quiere y todavía se lo pregunta: ¿Anular o recontar? ¿Incendiar al país o gobernarlo algún día? ¿Ser mártir asegurado o Presidente posible? ¿Aceptar lo que diga el árbitro o destruir el estadio? Ahora enfrenta la próxima jugada después de promover varias que van en contra del equipo nacional. AMLO no puede descalificar todo el juego y también insistir en que lo ganó. No puede exigir el recuento y también sugerir que no lo respetará. No puede seguir dando cabezazos y pretender que no se merece una tarjeta roja. Como escribió otro periodista francés ante la actitud ignominiosa de Zidane: "No importa cuán bella sea la actuación de un jugador; nada puede justificar el surgimiento de la bestia que lleva dentro".

Sunday, July 16, 2006

hasta el Osito Bimbo !!!!!

virulencias populistas













El privilengio de engañar... Martí Batres
"Como en el pasado, como en el 88, de nada se informa uno viendo la televisión. Por mi parte, prefiero leer cada mañana La Jornada. Es el único espacio, y subrayo, el único que está desnudando el vergonzoso fraude electoral que Vicente Fox, el PAN, Elba Esther Gordillo y el IFE organizaron el 2 de julio." Publicado en La Jornada el 13/07/06

Dirigentes perredistas, incluyendo a López, han tenido en los últimos días constantes apariciones en la televisión, han estado presentes en prácticamente todos los espacios de Televisa, donde los conductores les dan la oportunidad para hablar y hablar por varios minutos, en vivo. Coincido con Batres "de nada se informa uno viendo la televisión" y menos de escuchar a sus compañeros de partido, que con su poca elocuencia y virulenta exposición de puntos inconexos exhiben de manera vulgar su ambición por el poder.

Perhaps perhaps perhaps

Saturday, July 15, 2006

you are beautiful

Once there was a lovely girl with hair that changed in colour every few months depending on how she was feeling. Sometimes she felt full of life, excitement and energy and her hair had bits of shiny bright blonde that shone like the sun and gold at the same time, other times she had firey bits of red as well, there were also times when her hair was just plain brown. This did not happen very often as this meant she was feeling very sad, very very sad as she had had the colour changed properly. Sometimes, especially late at night when she was all alone and missing her friends her hair would look like it was just plain brown as it was the colours that represented her friends and when she missed them they disappeared. But such was the way of the lovely girl that often people noticed the red and blonde bits in her hair as she walked by and they made people smile just like she smiled at them when she was happy and felt her friends were there with her, even though some very special ones were a long way away. -- Charlotte Cottrell
Molotov Pepsi
TRIO - Da Da Da
El Privilegio de Mandar
Entrevista de AMLO con Lopez Doriga 11 Julio, parte 1
Entrevista de AMLO con Lopez Doriga 11 Julio, parte 2
Entrevista de AMLO con Lopez Doriga 11 Julio, parte 3

Thursday, July 13, 2006

Enciclomedia y embarazo


Los tres chiflados (López, Duarte y Monreal) y la lección de Enciclomedia-

Friday, April 14, 2006

why don´t you walk away

Walk AwayI sold my innocence for pride
Crushed the end within my stride
Said I'm strong now I know that I'm a leaver
I love the sound of you walking away, you walking away
Mascara bleeds a black in tear, oh
And I am cold, yes, I'm cold
But not as cold as you are
I love the sound of you walking away, you walking away
I love the sound of you walking away, walking away, hey hey
Why don't you walk away?
Why don't you walk away?
Why don't you walk away?
No buildings will fall down
Won't you walk away
No quake will split the ground
Won't you walk away
The sun won't swallow the sky
Won't you walk away?
Statues will not cry
Won't you walk away
Why don't you walk away?
Why don't you walk away?
Why don't you walk away?
Heymmmmm
I cannot turn to see those eyes
As apologies may rise
I must be strong and stay an unbeliever
And love the sound of you walking away, you walking away
Mascara bleeds into my eye, oh
And I'm not cold, I am old
At least as old as you are
La la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la la
And as you walk away
Oh, as you walk away
Oh, as you walk away
My headstone crumbles down
As you walk away
The Hollywood winds will howlAs you walk awayT
he Kremlin's falling
As you walk away
Radio Four is static
As you walk away
Oh, as you walk away
Oh, as you walk away
Oh, as you walk away
Hey
The stab of stiletto
On a silent night
Stalin smiles and Hitler laughs
Churchill claps Mao Tse Tung on the back

Tuesday, March 21, 2006

Monday, March 20, 2006

Tuesday, March 07, 2006

Sunday, March 05, 2006

Naked Berkeley

Students, many having shucked their Cal logo sweats and most other clothing, protest the manufacturing of university apparel in sweatshops, and what they say is UC Berkeley's resistance to ending the practice. Campus officials say the administration supports fair and equitable labor standards and that the UC system continues to work toward strengthening that effort. UCOP has established a UC Code of Conduct, which all manufacturers producing apparel with the University of California logo must sign and agree to uphold. In addition, UC is a member of the Workers Rights Consortium and the Fair Labor Association.

Friday, March 03, 2006

"The Story of the Clever Man" by Sweet Manzana

once upon a time there was a very clever young man
and he worked very hard
read a lot, listened to a lot of music and knew about many things
and he had some very special friends
but unfortunately for this man, some of them lived a long way away from where he lived
sometimes this made him sad
but they wrote to him and chatted with him and some of them even made him laugh
so really he was a very lucky man
and these friends thought about him all the time, even if they didn't get to see him all the time
they imagined him with a bright light around his head, shinning bright, such was his wisdom, charm and handsome good looks
did I mention that the young man had some tall friends, some short friends and one with a very pink coat
and then there was another one who told stories, and bad jokes and sometimes liked to cause a little bit of trouble, but never in a bad way and she was the one that missed him the most